Desde una perspectiva sumamente abstracta, la Casa Regency está conformada por dos volúmenes principales, interconectados por un área central. Esta distribución volumétrica rompe con la horizontalidad del diseño, dando como resultado un concepto más atrevido y original.
En la sala de estar, la doble altura crea una sensación de amplitud y libertad propiciando un ambiente de relajación en la compañía de la familia o amigos para después invitarlos a la sala de juegos, que cuenta con su propio bar enmarcado por un muro curvo recubierto de recinto.
Las habitaciones de los niños son más que un lugar para descansar, constituyen espacios lúdicos y dinámicos, ideales para su hobby favorito, leer un libro, escuchar música, escalar una pared o deslizarse por un tubo de bomberos.
En la parte posterior se construyó un muro llorón que cumple el propósito de dotar de privacidad al área de jacuzzi.
La habitación principal fue diseñada con una pared en acabado de concreto aparente, piso de madera en color natural y un gran ventanal que permite la entrada de luz.