Se trata de la continuación de un restaurant ya existente en la ciudad de Newark, USA, donde el cliente buscaba crear un espacio más íntimo, respetando el paisaje y la imágen de su restaurant base que cuenta con un estilo de hacienda colonial. De igual manera se le propuso al cliente no sólo el diseño de un restaurant más, sino un espacio que ofreciera una experiencia nueva y única en la zona, activando incluso la utilización del río, el cual cuenta con uso casi nulo en toda la entidad.
Se propuso dos áreas de comensales, una abierta tipo terraza y otra cerrada con un bar. De igual manera se otorgó un espacio de transición entre el restaurant base al nuevo restaurant y el otorgamiento igual de un muelle para las personas que piensen llegar en bote.









