Hasta hace poco los baños integrados en el dormitorio parecía que solo era posible encontrarlos en los hoteles de lujo. Sin embargo, hoy en día algunas personas se plantean esta opción si tienen que reformar su casa. Es cierto que antes de tomar la decisión, conviene conocer las ventajas e inconvenientes de baños integrados en el dormitorio, y si el tipo de integración que necesitas es total, parcial o visual. Sea cual sea tu caso, lo cierto es que estos 5 baños integrados en el dormitorio que hoy te traemos te encantarán.
1. Integración total
Cuando la integración del baño en el dormitorio es total, conseguimos un espacio diáfano más grande. Su amplitud es una de las grandes ventajas de la integración 100%. Sin embargo, hay que ser consecuentes con este tipo de dormitorio y pensar que a veces los olores procedentes del baño se pueden propagar por toda la habitación. También es importante tener el baño siempre recogido, ya que si no la sensación de desorden podría alterar la paz del dormitorio. Sería una buena opción para parejas jóvenes o para personas sin pareja.
2. Semi integración
Este modelo de baño está "semi-integrado" en el dormitorio. Eso significa que sí se puede acceder fácilmente desde la habitación pero hay un pequeño murete, puerta de cristal o semi pared que lo limita considerablemente del dormitorio. Es ideal cuando se vive en pareja y ambos tienen horarios similares. El murete no aisla del todo, pero sí preserva la intimidad de cada persona.
3. Separación visual
Otra de las posibilidades que podemos encontrar es separar visualmente el baño del dormitorio. Es decir, aunque el cuarto de baño esté integrado en el dormitorio, queremos algo más de intimidad. El cerramiento no es completo, pero la pared que separa ambas estancias es lo suficientemente importante como para preservar la intimidad. Eso sí, al no optar por puerta y poder acceder desde ambos lados del dormitorio, la sensación es de semi-fluidez. De hecho, podemos decorar de forma diferente ambas estancias.
4. Con separación, pero integrado
Aunque en este dormitorio tiene acceso directo al cuarto de baño con una puerta, no hay sensación de que ambos espacios estén totalmente separados. Esto ocurre porque se apostó por una pared (mitad muro y mitad vidrio), con lo que ambas estancias están conectadas. Desde el interior del dormitorio se puede ver el baño, aprovechando así la luz de ambos espacios, pero a la vez hay intimidad. Es ideal para parejas que tienen diferentes horarios y no se quieren molestar el uno al otro.
5. Un baño para dos y algo de intimidad
Lo bueno de este baño es que un pequeño muro a media altura y el resto hasta el techo de cristal, permitieron separar ligeramente el baño del dormitorio. Una buena opción si contamos con un espacio amplio y a la vez si queremos algo de intimidad, ya que se proyectó el baño a la espalda de la cama, proporcionando así intimidad a sus dueños. A la hora de decorarlo, se apostó por colores similares pero destacó la apuesta por un suelo totalmente nuevo y diferenciador del dormitorio. Un claro acierto.
hace 6 años
Great!
hace 4 años
Encuentro que varias personas se bañan con agua muy caliente y el vapor afecta a los muebles.