Cómo remodelar el baño sin quitar los azulejos

Si comenzamos por el piso, podemos hablar de soluciones que no requieren quitar los azulejos. Sí, hay opciones que pueden colocarse fácilmente sobre tu pavimento antiguo, como las losetas vinílicas o el linóleo autoadhesivo. Estos modelos tienen un impacto visual más que evidente, ya que son capaces de imitar cualquier tipo de acabado, desde madera hasta azulejos tradicionales de estilo hidráulico. Además, si en algún momento decides colocar otro tipo de piso o volver al original, puedes quitar las losetas fácilmente.

Sin confundirla con la resina, la pintura epóxica puede dar también muy buenos resultados, no sólo en pisos, también en los azulejos de la pared. Es una tinta de gran calidad y espesor en comparación con otras pinturas. Como ventaja, la aplicación es más sencilla que en el caso de la resina. Además, el tiempo de secado es mayor. El acabado es liso y ofrece un brillo intenso, aunque hay otros tipos de acabados mate. La pintura epóxica cuenta con un fácil mantenimiento y limpieza. No obstante, cabe destacar que su espesor es mucho menor que en el caso anterior, por lo que, aunque cubre la totalidad, no nivelará el piso ni logrará cubrir imperfecciones. Estos trabajos deben hacerse antes de aplicar la pintura para que el resultado sea óptimo.

Los revestimientos de madera OSB ya nos convencieron en otras áreas de la casa. Ahora en el baño y con el fin de evitar obras y quitar azulejos, también se presentan como una gran opción. Se trata de tableros de virutas que se distribuyen en diferentes capas, unidas con pegamento especial y prensadas. Además de ser un material ecológico, tiene una gran durabilidad y versatilidad. Cuenta con muchas de las características de la madera maciza, como insonorización, aislamiento y resistencia, pero es un material mucho más económico y de fácil colocación.

Si tu baño tiene las paredes lisas, ya sea parcial o totalmente, puedes optar por papel tapiz, además de pintar para darle un aspecto renovado a esta zona de tu hogar. La ventaja de este material es la gran variedad de modelos que existe, lisos o con dibujos. Eso sí, para su colocación en lugares húmedos como el baño, es necesario elegir un tipo de papel tapiz específico, el papel vinílico, que será impermeable y nos evitará problemas. Además, en el caso de elegir un papel con dibujo o algún modelo que siga un patrón determinado, siempre es mejor pedir ayuda a un profesional para que la colocación sea perfecta.

Si tus pisos y paredes no están tan mal y simplemente quieres mejorar la decoración de tu baño con un cambio completo, los muebles pueden ayudarte. Un mueble de baño no resultará excesivamente caro, y cambiarlo tampoco es un trabajo que requiera mucho tiempo. Una alternativa limpia y sencilla que se ajustará al estilo decorativo que más te guste.

¿Columnas o huecos difíciles de aprovechar en tu baño? Las estanterías a la medida pueden ser la solución que estás buscando, ya que se adaptan por completo a las medidas de cualquier área. Puedes aprovechar el espacio entre columnas, o incluso extender el almacenaje a la parte más alta de la pared. Además, lejos de lo que podamos imaginar, hay materiales limpios y sencillos de colocar, como la tablaroca, que no cuenta con limitaciones estructurales y que, además, puede pintarse sin problemas para adecuarse al estilo de tu baño.