Nuestra vida ha dado un giro de 380°, debido a la pandemia que asola todo el mundo, se ha modificado nuestra forma de relacionarnos, de trabajar e inclusive de estar en nuestros hogares. Por eso, esta nueva normalidad nos implica rediseñar nuestros hábitos diarios e inclusive cambiar algunos elementos de nuestra cotidianidad, con los que podremos hacerle frente a esta crisis sanitaria y estar menos expuestos a este y otros virus. Adaptar costumbres que antes no teníamos como sanitizar nuestro calzado, antes de ingresar a nuestro hogar, entre otras medidas de cuidado y prevención, llegaron para quedarse al menos por los próximos dos años, así que, hoy te mostramos como actualizar tu vivienda para adaptarla a los tiempos después del COVID-19.
Definitivamente, esta simple acción, previene que nos infectemos de esta y otras enfermedades virales, pero ¿Podemos lavarnos las manos de forma más segura? Sí, con los grifos de sensor que se encienden sin tocarlos, son de gran ayuda en espacios como los baños públicos. Por lo que también serán un plus de seguridad para nosotros y nuestras visitas.
Al estar diseñados con un sensor que detecta el movimiento, permite que se activen de forma automática, sin necesidad de tocar ningún elemento, estos grifos, además de brindarnos la tranquilidad de no ser manipulados para su uso, evitan contagios de virus entre personas, contaminaciones cruzadas entre alimentos y también ayudan a evitar desperdicios de agua, si alguno de nuestros chicos olvida cerrar las llaves del agua.
2. Aire acondicionado en la nueva normalidad
Antes que nada, no entres en pánico, ni pienses que el virus está buscándote, si bien es importante seguir las medidas sanitarias básicas, como el uso de cubrebocas y el lavado constante de manos, no te dejes llevar por la angustia. Y en cuanto al aire acondicionado, los expertos en microbiología han realizado estudios y aseguran que éstos no tienen que implicar necesariamente riesgo. Esto debido a que se usan en un ambiente familiar y controlado.
Además, al haber una renovación constante del aire, permite una mejor ventilación del lugar y mejora la calidad de este. Aunque los cientificos si aconsejan mantener limpios los filtros, conservar la temperatura entre los 24 y 26°, colocar la salida del aire hacia el techo y si no se cuenta con clima artificial, no emplear el uso del ventilador de aspas, ya que este únicamente mueve el aire de un sitio a otro, es mejor abrir las ventanas. Pero si invitamos a más gente a casa, es mejor no usar el aire acondicionado durante estas reuniones.
3. Redistribuir el espacio para visitas
Aunque lo recomendable es no organizar reuniones, si podemos estar con un número limitado de personas en nuestro hogar, ¿Cuántas? Esto dependerá del tamaño de tu vivienda, pero, aunque tu casa sea grande, deberás considerar no sobrepasarte y en total con los miembros de tu familia, no más de 10 personas en tu sala, que normalmente es el punto de reunión o el jardín.
Adaptemos nuestro espacio con asientos alejados uno de otro, y para ello puedes recurrir a bancos auxiliares y considera colocar botanas individuales en la mesa de centro, en lugar de una compartida. Y procura abrir de vez en vez tus ventanas para limpiar el ambiente.
4. Dos baños mejor que uno
¿Seguro si había pasado por tu mente lo útil que sería contar con un baño extra? Y no lo te habías decidido, porque no lo considerabas indispensable, pero con esta circunstancia, tal vez debas de planteártelo seriamente y no sólo por el hecho de al estar la familia todo el tiempo reunidos, en más de una ocasión habrán coincido al querer utilizarlo al mismo tiempo, sino porque sería bueno poner uno a disposición de las visitas, y el otro reservando solo para los integrantes de la familia.
Además, en el nada deseable caso de que alguien se infectara, al contar con dos espacios, los demás integrantes podrían mantenerse alejados y correr menos riesgos.
5. Casas domotizadas
Si bien la tendencia en las últimas décadas era una clara automatización en los hogares, el COVID -19 vino a acelerar esta situación, por lo que este incremento también puede ser un apoyo para evitar tocar las superficies de nuestros electrodomésticos, y por consiguiente contagiarnos o contaminarlos.
Con acciones como eludir tocar el picaporte de la entrada de nuestra puerta, porque con una simple orden se abren, tanto puertas como persianas o climatizamos el ambiente, la domótica puede ser una gran apuesta por nuestra seguridad tanto física como mental y todo desde tu celular. Según los expertos puedes iniciar con un dimmer para regular la luz de una estancia y de poco a poco aumentar el confort de tu casa. Sólo asegúrate de contar con una instalación resistente a ciberataques.