A todos nos gustaría que nuestra casa tuviera grandes ventanales por los cuáles entre la luz natural, pero no siempre es posible. Y aunque nuestro hogar no cuente con ellos o con la mejor ubicación, siempre hay formas de conseguir una casa más luminosa. Hoy te contaremos algunos trucos sencillos para conseguirlo, sin derribar un solo muro, solo dependiendo de cómo distribuyamos el espacio, cómo aprovechemos las ventanas o de qué colores usemos en las paredes y pisos, así que síguenos para enterarte.
1. Aprovecha la luz natural para trabajar
Lo ideal, ya sea para trabajar o estudiar, siempre es la luz natural, por lo que si haces home office o tus pequeños estudian en casa, el mejor lugar para llevar estas actividades es lo más próximo a una ventana, además de mejorar la concentración, la iluminación natural reduce la fatiga visual.
Coloca persianas blancas o en colores pastel, esto te permitirá reducir la cantidad de sol al interior, pero sin aminorar la iluminación.
2. ¡Luz natural por un tubo!
¿Creerías que puedes capturar la luz solar por un tubo y que este ilumine el interior tu casa? Pues así es, los tubos reflejantes o solares son ideales para ti que quieres reducir el consumo energético o hacer de tu hogar un sitio más eco amigable. Este maravilloso invento recoge la luz solar que incide en los tejados, paredes o pisos y la envía a tus estancias sin recurrir a la corriente eléctrica.
Los tubos de luz aportan hasta 14 veces más luz que una bombilla normal y te proporciona hasta un 98% de reflectancia. Es ideal para estancias oscuras como recibidores, cuartos baño o espacios abuhardillados. Solo existe una condición, y es que entre el techo de la habitación y el tejado no exista una distancia mayor a 6 metros. Por lo demás es la solución sencilla, limpia, económica y luminosa para llenar tu casa de vida, aún por la noche.
3. Decorar de forma sencilla el salón
Para conseguir un ambiente en el que la poca iluminación natural se multiplique existen soluciones simples, como tenerlo todo ordenado ¡Es cierto!, los espacios despejados y una decoración visualmente limpia, ayuda a que las estancias parezcan más grandes.
De igual manera, pintar el interior con colores cálidos hará de tu casa un lugar más confortable, ya que estos tonos permiten que la luz, por poca que sea se esparza mejor, además elegir una decoración sencilla y poco recargada ayudará a que el salón se vea más luminoso.
4. Persianas enrollables blancas para dormitorios luminosos
¿A quién no le gustan las recámaras llenas de luz? Son energéticas, cálidas y por las noches tienen una temperatura agradable. Así que, si quieres que la tuya capte mayor iluminación, te sugerimos instalar persianas enrollables con una opacidad del 10%, para dejar pasar la luz, pero, al mismo tiempo, reducir la intensidad de los rayos solares
En cuanto al tono, lo mejor son los colores blancos y dimensiones pequeñas. Evita colocar cortinas pesadas de tejidos grueso, ya que además de absorber más polvo, provocaría el efecto contario.
5. Ventanas despejadas para comedores
La mejor manera de iluminar tu casa es a través de las ventanas y si cuentas con varias de ellas, aprovecha sus bondades y en la medida de lo posible mantenlas despejadas. En algunos países como Noruega tienen esa costumbre, aunque claro ellos no cuentan con tanta luz, ni tan intensa como en México.
Aunque si te preocupan las miradas indiscretas coloca cortinas delgadas, que permitan el paso de los rayos solares y del aire. También pintar la perfilería de blanco es otra manera de potencializar la luz al interior.
6. Colores intensos en su justa medida
Para ganar iluminación en tus estancias no debes de restringirte solo a los tonos claros, también puedes incluir gamas más intensas y es que si sabes combinarlos el color y los estampados pueden ayudar a hacer "más luminosa" una cocina, especialmente cuando los muebles, paredes y suelos son blancos
Es importante que consideres algunos factores para conseguir el efecto deseado, como la orientación de la cocina y los puntos directos de luz natural, que pueden provenir de las paredes o el techo. Si logras compaginar bien estos factores, aumentarás la sensación de luminosidad de la cocina.
7. Colores pastel para dormitorios infantiles
En las recámaras infantiles por lo general se busca que estén bien iluminadas, así que para logar que un dormitorio infantil parezca más luminoso cuando no lo es, recurrimos a colocar colores suaves como los tonos pastel, los cuales permiten que la luz fluya con naturalidad.
Además de que esta gama de tonos combina perfectamente con el mobiliario infantil, nos sirve para crear acentos de color en determinadas zonas, logrando que el dormitorio de los niños sea un lugar agradable y relajado.
8. Abrir ventanas personalizadas en el baño
Algunas estancias como los baños suelen ser sitios con poca iluminación, y aunque existen truquitos como el uso de grandes espejos para que se refleja mejor la irradiación de los focos, la verdad es que no hay nada como la claridad natural.
Así que, para mejorar no solo la iluminación, sino también la ventilación de estas estancias lo más recomendable es abrir claraboyas, lucernarios o ventanas de tamaños personalizados, dependiendo del espacio o tipo de apertura que prefieras.
9. Rincón para la lectura
Si eres una amante de la lectura, en definitiva, sabrás que para ese rinconcito en donde echamos a volar nuestra imaginación, nada mejor que la luz natural y para potenciar el efecto lo mejor es pintar las paredes de tonos claros, blancos, beige, pastel... y complementar el lugar con muebles cómodos.
Un tip para conseguir el espacio ideal, es que combines los muebles y los colores de los demás accesorios en la misma gama cromática que los muros y ¡Ahora si a disfrutar!
